jueves, 25 de septiembre de 2008

Y ahora: ¡mi mamá!

Hoy, hace algunos septiembres nació mi mamá. Ceci me comentó que la relación entre padres e hijas es diferente a la de mamás e hijas y creo que tiene rázón. Serán los complejos de Elektra y Edipo, o las semejanzas del género, pero las mamás (al menos la mía) son siempre una presencia física. Aunque no estemos en el mismo espacio, las hijas nos sentimos cobijadas por esa hadita que es la mamá.
Yo no sé que escribir de Winfa. Ella es la luz de mi vida, mi guía, mi modelo a seguir y mi hada madrina. Una vez platicaba con Esteban que las mamás nos arreglan la vida, que a mí en particular la mía me falta más entre más vieja me hago. Si se requiere algo de cocinar: "Mamá ¿como se hace?, si hay que tomar una decisión: "Mamá ¿que te parece?". Si las hijitas se enferman: "Mamá ¿que hay que darles? ". Mi mamá es mi maestra, chef, doctora, terapeuta, modista, diseñadora de interiores y miles de etcéteras más como miles de profesiones hay en la vida. Yo sé que no sería nada de lo que soy, si Winfa no estuviera de por medio. Sé que la vida me premió desde antes de nacer, porque me envío a su vientre. Treinta años han pasado desde que la ví por primera vez y aún no deja de sorprenderme como tantas bendiciones pueden concentrarse en una sola persona, como su mirada despeja las tempestades y atrae la paz, como su protección se extiende aunque estemos lejos.
Winfa protagonista de vida, gracias por saber tanto de tantas cosas, por estar siempre conmigo, por enseñarme a equivocarme y a reflexionar. Gracias por tus pláticas divertidas y eternas. Gracias por cuidar de mis pequeñas hijas desde que supiste que vendrían al mundo. Gracias por ser quien eres y gracias por ese maravilloso espiritu que tienes. Hoy más que nunca, mi más sentimental te amo es para tí.

lunes, 22 de septiembre de 2008

El lado obscuro

Todos (pero todos-TODOS!!) tenemos un lado maloso. Malosillo, malosón o malosito, según sea el nivel, nuestro ser arraiga esa pequeñísima parte oscura que nos equilibra el espirítu. El mío sale cuando me encuentro con personas espejo de lo que yo era hace algunos años (cabezas huecas, que creen que todo lo saben, que hablan sin pensar y sobre todo: que presumen hasta de lo que presumen) Gracias a Dios que mi familia y amigos se han empeñado en centrarme, porque de verdad que esa gente es súper molesta. En mi oficina pululan ese tipo de chicas, por ello yo me encierro. Si necesito oxigeno, llamo a Roby, o a Liz, o a Marthis o a mi mamá o procuro toparme a Edgar. Si la atmosfera está muy densa, corro al OXXO a comprarme un napolitano, alejándome de la escena.
Resulta que el viernes pasado, una de esas chicas equis llegó a mi oficina lanzando a quemarropa la siguiente pregunta: "¿Te gusta mucho la literatura?" Yo, en afán de no ser mal plan (lo juro!) le dije que sí y continué escribiendo en la computadora, pero el diálogo siguió: "Entonces, seguramente leíste la novela de ¡¡¡EL LLANO EN LLAMAS!!! (sacrílega!) , Yo la leí y me quedé impactada con la narración de la guerra..." pero... le contesté, con harto cinismo, El llano en llamas no es una novela, es un libro de cuentos... Lo peor fue que continuó: "Ay me confundí ... es otra novela del mismo monito" Mi cinismo también continuó: Juan Rulfo solo escribió 2 libros (Más 1 de cartas a su esposa, que no escribió como libro, pero que se editó como tal) pero ninguno es de guerra. La chica siguió empeñada en que sí, y cuando le expliqué la imposibilidad de su teoría, me dijo "bueno.. de lo que si he leído mucho es del HOLO-CAUSTRO" AMONOOOS!!! Si soy malosa y ácida, lo reconozco, pero más lo soy con personas de ese tipo. Mi mamá lanzaría el consejo de ejercer la tolerancia y la bondad, pero mi trabajo me ha costado ser malosa, así que ¿porque repirmirme? Ahhhh! Las cosas que uno ve en las oficinas. Habrá que proponer que se hagan museos, porque hay cada espécimen (incluyéndome a mí, claro!)
PD.- Gracias a Dios (de verdad) por mis amigos, porque su amor es un intercambio de palabras y de silencios llenos de vida. Gracias por ayudarme a valorarme y a dejar de ser una simple y común pou-ser (Los quiero!)

jueves, 11 de septiembre de 2008

Clases de Civismo

Hace algunos días en el periódico El Norte, diversas organizaciones empresariales publicaron un desplegado quejándose de que en Monterrey, la corrupción ha alcanzado niveles intolerables. Siguieron entrevistas, denuncias, disculpas del alcalde, promesas para remover funcionarios corruptos y demás faramalla sociológica.
Muchos comentarios relativos he oído de quienes habitamos esta H. Ciudad. Yo misma, cuando la zorra-cruzada tenía las placas vencidas, me sentí un criminal, porque no había día en que los tránsitos me dejaran en paz. Diario me perseguían para bajarme dinero, amenazando con llevarse mi auto, escudándose en que el Reglamento de Tránsito dice que ningún vehiculo puede circular con placas vencidas, sin importar que -como en mi caso- fuesen foráneas. En el mismo tenor, comentarios de personas con tienditas que son extorsionados por inspectores rapaces, constructores a quienes les detienen las edificaciones por negarse a pagar dádivas. Y el caso de los parquímetros que te robaban las monedas de 5 y 10 pesos, sin el menor pudor.
Que bueno, que existió ese desplegado. Creo que en este mes patrio, esa fue la mayor muestra de amor a México. Que bueno que quienes lo firmaron dieron la cara y narraron casos vividos. La mayoría de las veces, nuestros gobernantes olvidan que estar ahí es su TRABAJO, y que es un trabajo como el mío, como el de los maestros, como el de cualquier empleado. La exigencia es de la ciudadanía, no al revés. No importa si el aprendizaje dura días o meses, lo que importa es que las clases de civismo han comenzado.

jueves, 4 de septiembre de 2008

Amazing

Hoy mi papá cumple 60 años. Yo lo conocí hace 30 y desde que recuerdo es una persona imprescindible en mi vida. Siempre será mi súper heróe, aquel al que casi no veía porque se la pasaba trabajando. Ese que llegaba con dulces carísimos comprados en la tienda del hotel cuando le llamaba para decirle que necesitaba llevarlos a la escuela. El que los 31 de diciembre desaparecía y aparecía porque organizaba las cenas de fin de año, ese y muchos recuerdos inolvidables más, es mi papá.
Es curioso que uno como hijo, al hacerse padre (o madre) cambia su percepción de las personas. Ahora que soy adulta, comprendo que el ejemplo más grande que me dió fue el de trabajar. Mi papá siempre dice que su único defecto es que no sabe robar y que por ello no hizo más fortuna. Ser honesto es muy difícil, sobre todo cuando el ambiente está lleno de corrupción, pero le creo. Creo que siempre trabajó demasiado y que se esforzó aún más y a su manera para llegar lejos y hacerse un nombre en el complicado mundo laboral.
Mi papá es una prueba viva de la existencia de Dios y de sus milagros, un recordatorio de que nada está perdido aún perdido. Mi papá es la crítica fuerte, la palabra ausente, el abrazo conciliador y las preguntas sin respuesta. Mi papá es el amor tierno, la visita sorpresiva, la mirada que habla y el cariño reflejado en sus comidas. Mi papá es todo, es la obscuridad y la luz, la caída y el resurgimiento, el silencio más significativo y la imagen más permanente. Es la música de los beatles y la hermosura de San Francisco, es su "Hola Mon!" gritado con una sonrisa.
Pienso en él todo el tiempo y más cuando oigo a Aerosmith cantando "Is amazing, with the blink of an eye, you finally see the light" . La mayoría escuchamos sin darle mayor significado, pero esa frase tan hermosa y cierta define el punto más relevante de sus 60 años. Que privilegio poder mirar al mundo después de ver solo sombras. Que milagro estar cerca de alguien que sabe lo sorprendente que es ver la luz.
Mi papá ya no solo es mi papá, sino el abuelito de mis hijas y como él no hay ni habrá nadie. Me encanta mi papá haciendo hotcackes a las 8 de la noche y comprando relojes a Monty aunque no sepa leer la hora. Me encanta la vida que me dió un papá como él y que me ha permitido crecer lo suficiente para darme cuenta de lo afortunada que soy. Eso sí que es súper extra mega amazing.
Dios bendiga a mi papá, por siempre.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

Mi mamá es una ensalada (parafraseando a Mariana)

Ayer fui a cenar a casa de mi mamá. ¿Que tienen las mamás en las manos que hace que su comida sea deliciosa? Yo hago las quesadillas igual, ¿que chiste puede tener su elabración? pero no hay punto de comparación con las que prepara Winfa. Como dicen en Kung-Fu-Panda... el ingrediente secreto es ... ¡nada! Será la práctica, será una bendición, lo único que espero es vivir para estar con mis hijas cuando tengan 30 años y ya entrados en gastos, recibir los poderes mágicos para cocinar exquisitamente.
Abrí la vasija de la ensalada y encontré un mosaico de colores típico de Winfa. Ahí convivían armoniosamente, lechugas orejonas, zanahorias brillantes, germinado de lentejas y repollo morado. Ver ese cuadro comestible hizo que me acordara de un post escrito por Mariana en el que dice que muchas de sus querencias están amarradas a la comida. No sé si es coincidencia, o si es el gen cocinerillo, pero pienso lo mismo. Si describiera a mi mamá en un platillo, sería una ensalada, porque sus ensaladas son como ella: coloridas, llenas de vida, vibrantes, sanas, apapachadoras, y sobre todo ÚNICAS. Mi papá sería sus sopas, que parecen las sopas de fideo de todo el mundo pero tienen un sabor permanente, como sus enseñanzas. También sería su creación para la cenas de fin de año, titulada surf&turf, muestra perfecta de su sobriedad, su elegancia y el análisis riguroso que rige su vida. Roby, sería sus sandwichitos de cheez weez o de galletitas Marías, creativos, mágicos, sencillos, detallistas y grandiosos, como él.
Mariana tiene razón, si le pienso más, haría una lista interminable de afectos y comidas, de momentos y emociones, de vivencias y reflexiones. Mi abuelita Luz siempre dice que la comida es la vida. También ella tiene razón.